El circulo cromático
Los colores
despiertan sentimientos, producen sensaciones, afectan al estado de ánimo,
estimulan ciertas actividades e inducen a la relajación, su presencia define el
carácter del hogar, conforma su estilo y revela la personalidad de sus
ocupantes. No existen normas estrictas de uso. Pero es necesario tener en
cuenta ciertas pautas arraigadas en la cultura y en la psicología de la
percepción sensorial (la respuesta de nuestro cerebro a diferentes estímulos luminoso).
La austeridad, el
purismo, la sencillez y la desmaterialización que lo definen deberían coincidir
con un uso particular del color que acentúe su carácter o invite apenas a
romper sutilmente su armonía.
Para comprender
mejor el efecto de cada color, que depende de factores psicológicos que la psicología del color estudia
exhaustivamente, es necesario utilizar un circulo cromático que contiene los
colores primarios (rojo, amarillo y azul), los secundarios y los intermedios, y
muestra los colores complementarios que, a pesar de estar situado en el extremo
opuesto del circulo cromático, brindan las combinaciones más armoniosas.
Toda
esta teoría resulta indispensable a la hora de elegir la gama de colores para
decorar un espacio, ya que su elección y su combinación determinan el resultado
final y la percepción sensorial del espacio.
Juego de colores
Dicho en términos
comunes los colores se pueden clasificar en cálidos y fríos según las
sensaciones que despiertan en los seres humanos. Se pueden crear infinitas
combinaciones a partir de estas clasificaciones, las cuales influyen de
múltiples maneras en las diferentes atmosferas.
Cuando se usa el blanco en
combinaciones con otro tono, será este último el que transmita la personalidad
en la decoración. Si es el rojo, por ejemplo, desprenderá brillo, fuerza y
vigor, si es el verde o el amarillo, tranquilidad y concentración; mientras que
los azules pálidos reflejan serenidad y relajación. La combinación de dos
colores que no contenga blanco o negro resulta más complicada: si envuelve
colores complementarios, el resultado puede ser un espacio armonioso. De lo
contrario puede resultar agobiante y demasiado elaborada. Una gran parte dl
peso también recae en los matices, pues determinan la percepción de la
atmosfera. En pocas palabras el color y sus combinaciones se pueden usar para
crear espacios inspiradores que busquen mantener su esencia y su forma más
pura.
Armonía
Los colores
armoniosos son los que combinan bien juntos. Producen un juego de colores
atractivo, equilibrado y sereno. El círculo cromático es una herramienta
inestimable para encontrar la armonía. Los colores se distribuyen de acuerdo
con el segmento de luz visible del espectro solar. Se excluyen el blanco y el
negro.
Según este sistema, los colores cálidos, es decir, el
amarillo, el naranja y el rojo, crean atmosferas acogedoras. Los colores fríos,
en cambio, aportan serenidad a las estancias y frescura a las zonas con mucha
luz solar. Estos colores son la gama de
azules, violetas, verdes y grises. Partiendo de cualquier color se puede
dibujar un triángulo equilátero sobre el círculo cromático. Así, los colores
primarios forman un trio armonioso de la misma manera que los colores
secundarios, pero las combinaciones de estos dos grupos no se suelen usar
porque no combinan bien.
Consejos
1.- Si se van a usar
varios colores para las diferentes partes de la casa, es una buena idea usar
aquellos que están próximos entre si en el círculo cromático.
2.- Para los muebles
se puede utilizar el mismo principio, usando adecuadamente los colores.
3.- Al usar
combinaciones cromáticas en una habitación, el color más fuerte debe reservarse
para los muebles más importantes.
4.- El color de base
es el que se usa más ampliamente, y condiciona los demás. El color de acento
complementa al color de base y aporta un énfasis en el juego de colores.
5.- en una composición
armoniosa en la que el color de base es el verde pálido (muros) y el color de
acento es el rosa (piso) el color complementario puede ser el lila (mueble).
6.- Los ocres, los
naranjas y los rosas van bien en espacios grandes muy frecuentados, pero los
muebles deben estar en armonía con estos colores.
7.- los azules, los
verdes y los violetas son buenos para pequeños espacios, ya que dan la sensación
de lejanía y amplitud.
8.- los colores que
combinan mejor con la madera son los próximos al naranja, es decir, el verde,
el amarillo, el rojo y el rosa.
9.- Hay tener en cuenta
las combinaciones que se realicen para las diferentes áreas del hogar, estudiar
bien la psicología del color, la teoría del color, y otras disciplinas que les
proporcionen conocimientos amplios del tema.